Nosotros

Quienes somos

El Hotel & Restaurante Reinares, una empresa de origen familiar ubicada en la ciudad de San Felipe. Fue fundada en 1962 por los visionarios propietarios, Don Hugo Reinares y su esposa, Olga Puentes, la empresa comenzó como un modesto restaurante que, con el tiempo, evoluciono para abarcar también el rubro hotelero en 1973.
CHIMENEA-ANTIGUA

Chimenea antigua

Desde sus inicios, la sala «La Chimenea» fue diseñada como un espacio acogedor donde las familias y viajeros pudieran compartir momentos especiales en torno a una cocina cálida y tradicional. Su imponente chimenea de piedra, su mobiliario clásico y su ambiente familiar reflejaban el deseo de sus dueños de crear un lugar donde la hospitalidad y la buena mesa fueran protagonistas.

CHIMENEA-NUEVA

Chimenea nueva

A lo largo de los años, este espacio ha evolucionado, pero sigue conservando el espíritu con el que fue concebido: ser un rincón lleno de historia y calidez. Hoy, su cálida iluminación y paredes en tonos verdes se combinan con mesas de madera y cuadros enmarcados que retratan paisajes de Aconcagua, resaltando la esencia y belleza de la zona. Un ambiente acogedor que invita a disfrutar de una experiencia gastronómica con historia.

PERGOLA-ANTIGUA

Pérgola antigua

Con sus murallas amarillas y grandes ventanales que dejan entrar la luz del día, «La Pérgola» se alza como el corazón del restaurante. Las mesas cuadradas, dispuestas con armonía sobre un piso rojizo cuidadosamente encerado, reciben a los comensales en un ambiente cálido y familiar. A lo largo de los años, este espacio ha sido testigo de incontables encuentros, donde generaciones han compartido momentos que perduran en la memoria.

PERGOLA-NUEVA

Pérgola nueva

Hoy, «La Pérgola» mantiene su esencia acogedora, pero con una nueva calidez en sus tonos. Sus murallas en colores café se funden con el piso en tonalidades similares, creando un ambiente armónico y sereno. Los grandes ventanales siguen enmarcando la vista a los árboles que han acompañado este espacio desde siempre, conectando el salón con su historia. En sus muros, cuadros antiguos de artistas de la zona rinden homenaje a la identidad local, mientras las luces cálidas caen delicadamente sobre las mesas cubiertas de roble, invitando a compartir momentos especiales en un entorno lleno de tradición.